Y ahí estaba Gloria, hermosa, encantadora, llamativa, siendo ella en un día normal en su vida común; paseando por las calles del centro de la ciudad de compras. Su largo cabello rubio oscuro brillaba con el sol, y su sonrisa coqueta engatusaba a los hombres que la miraban.
-Mira ese vestido. Me gusta.
Su voz, a pesar de ser agradable, era dos tonos más fuerte de lo que aparentaba su rostro dulce.
-Ya lo vi. No tienes porque jalarme.
Su hermana Victoria era por el contrario de cabello corto y oscuro; y al verla solo la podías describir como elegante, misteriosa y sabia; con su actitud fría con los del mundo que la rodeaba y calidad con los de su mundo. Gloria.
No podían estar juntas, su carácter opuesto no las dejaba, pero no podían cortar su conexión. Era angustiarte no saber nada de la otra. ¿Siempre fue así? No, definitivamente ellas no se soportaban ¿Cuándo ocurrió esto? Eso paso cuando apenas eran unas niñas de 6 y 8 años.
Todos los seres humanos tenemos un Ángel de la Guarda, no era diferente con estas hermanas.
Una noche de agosto la pequeña Victoria jugaba con sus muñecas, al ver que su escuela de señoritas le faltaban más estudiantes buscos las de su hermana, no tardo Gloria en regresar al cuarto y al ver sus muñecas trofeos (porque eran solo eso para ella, solo adornos bonitos a los cuales podía decir que eran suyos) se exalto tanto que le grito a Victoria y le arrebato las muñecas alegando que no podía tocar lo que no era suyo. Victoria trato de protestar pero su carácter tímido tomo las riendas haciéndola llorar en vez de reclamar.
Desde un lugar no muy lejano de Gloria un ser de cabellos de oro y sonrisa de ensueño miraba con reproche la situación. Observaba a Victoria y susurraba en un idioma que no es de este mundo pero que entiendes.
Gloria no puedes tratar a tu hermana así.
Pero ninguna de las dos niñas lo oyó. Gloria trato de silencias a su hermana gritando y reclamándole más lo cual, por supuesto, empeoro a Victoria. Gloria exasperada levantó la mano para acertarle un golpe. PLASS. Apenas Victoria comenzó a sentir el dolor su llanto aumento.
Vasta Gloria.
Sus palabras penetraron en la niña que ya lista para lanzar el siguiente golpe se detuvo en el aire y vio por unos segundos algo que penetraría en su mente para siempre. Los ojos de su hermana aun le corrían un mar de lágrimas pero en ellos se veía un espacio negro, profundo y frio, era una sensación tan horrible que quedo en stock. Un temblor recorrió todo el cuerpo de Gloria y supo porque. Era odio.
Te odia.
Se lo confirmo su ángel.
Victoria temblaba de ira e impotencia pero no por eso dejaba de llorar. Fue tanto sus sentimientos que su mente quedó en blanco y su cuerpo se movió con toda la furia hacia su hermana. Un rápido destello pasó entre las hermanas y otraser resplandeciente pero de facciones duras y hermosas le toco la frente a Victorio con su dedo índice.
No.
Victoria no paro, pero no se fue sobre su hermana sino que salió volando del cuarto. Todo fue tan rápido que esto quedo solo en el sub consciente de las niñas, realimente no lo recuerdan. Pero no que sucedió después.
Si sigue acumulando sus tristezas Victoria podría poner en peligro a los que la rodea y a ella misma.
En ese mismo momento Gloria se recupero y empezó a refunfuñar y agarrar con gran molestia sus muñecas.
El carácter impulsivo de Gloria la meterá en grandes problemas con los que la rodean, y más si sigue presionando a su hermana de esa manera.
El ángel de cabellos dorados miro el bombillo y este se apago junto con todos los demás de la casa. Gloria queda petrificada; por lo bajo llamo a su mama, al no recibir respuesta llamo a su hermana. Su ángel movió una mano y el viento que produjo hizo caer la silla que estaba cerca de Gloria. Horrorizada Gloria corrió fuera de la habitación. Antes de salir disparada le pareció ver un destello de luz con forma de humano, tenia cabellos como el oro y el sus labios una sonrisa juguetona.
Se buena con tu hermana.
Esto sí que lo recordó años después.