sábado, 11 de febrero de 2017

Carta del anti-orgullo



¿Y si te digo que te quiero en mi vida? 
¿Y si me niego a que te alejes?
¿Y si te digo que no me importa si somos conocidos, amigos, hermanos, colegas, o lo que sea, que solo quiero verte en ella?
Quiero verte porque me gusta tus ojos oscuros y tú sonrisa estupida. Quiero estar a tu lado porque en ese lugar hay calma para mi alma que es un caos.
Quiero estar de apoyo tanto para reír como para llorar.
Quiero extenderte la mano cuando te vallas a derrumbar.
Siento que necesitas que te ayude, no porque piense que otra persona no te pueda ayudar.
Porque siento que necesito también de tu ayuda, no porque piense que otra persona no me la pueda dar.
Sino porque así me nace el sentimiento.
"Quédate en mi vida" Esas palabras son más que un cumplido, son una realidad.
Pero estás en libertad de rechazarlas y alejarte.
Y eso no me molestara.
Me molestara que sabiendo lo que te dije lo ignoraras y como estático té quedaras. 
¡Vete! Dejándome un buen recuerdo.
O quédate, y hagamos que el momento sea eterno en la mortalidad de nuestros cuerpos.

Autor: Luisais Pire

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